Corren tiempos de apuro, de múltiples actividades.Y corren tiempos de mucha oferta culinaria, de lo más variada y rica, en restaurantes y take out.Pero nada es lo suficientemente bueno como para competir con lo fatto in casa.Si creés que la cocina no es lo tuyo, te recomendamos que leas los esta nota para incursionar en ella con otros ojos (¡y nariz y boca!).

Doña Petrona decía: “Sin buena cocina no hay familia feliz”, seguramente para graficar el amor que surge de una comida casera.Pero, ¿por qué le huimos muchas veces a la cocina? Es importante distinguir que cocinar en casa no significa que debemos hacer platos dignos de un Cheff.Simplemente, hablamos de realizar comidas fáciles, sencillas, ¡y caseras! Maru Bottana nos recomendó en la entrevista que le hicimos (ver sección Entrevistas) algo mucho más sano y amoroso para los niños: “Busquen recetas fáciles, no se compliquen.Siento que hoy la mujer (y es comprensivo) no tiene tiempo, pero me da pena que compren comida rápida o prehechas que no son tan sanas, porque hay muchos platos super fáciles que no llevan tanto tiempo.Tenemos muchos cortes de carne riquísimos que los haces en dos minutos con un puré super rico y sencillo.Muchas mujeres piensan que meter un paquete prehecho en el horno es comida y no está bueno”.

Hay que desmitificar que cocinar en casa necesariamente lleva mucho tiempo y trabajo.Una buena manera de hacerlo es disfrutar de los beneficios que implica incursionar en nuestra cocina.No sólo por lo saludable de los alimentos, si no también, como “terapia” para quien cocina.

El Cheff Pablo González Orejan nos propone un cálculo: hasta si sumamos el tiempo de la compra de los ingredientes, los preparativos y la cocción de un menú sencillo, seguramente tendremos en menos de dos horas un plato listo para servir.“Creo que tanto a hombres como a mujeres los detiene el hecho de pensar que pueden combinar mal los sabores o los condimentos.Para eso hay que arrancar con platos básicos, como un pollo a la sal (pollo entero al horno sobre colchón de sal gruesa) acompañado de papines asados con romero y oliva.O bien, pastas con salsa de tomates, albahaca y parmesano; o una rica ensalada con un simple condimento de oliva, aceto y sal fina”, explica.

En cuanto a la salud, comer en casa te da la posibilidad de utilizar ingredientes más frescos como hortalizas y verduras, aceites de oliva o en spray (cero grasas trans ) y también, destaca el Cheff: “Te ayuda a economizar mucho más”.“Yo empecé así en mi casa, luego para mis amigos y familia, y terminé estudiando para tener mi propio emprendimiento de servicio de catering y repostería artesanal”, concluye el Cheff.

Una excelente terapia

Si tenemos un poco más de tiempo y queremos que en lugar de una complicación sea un disfrute.Vamos a pensar un plato, vamos a disfrutar de buscar y comprar los ingredientes, y vamos finalmente, a dedicarnos con esmero y dedicación a lograr ese plato.Podemos agregar música, una bebida, invitar a hijos o amigos a la cocina a colaborar.Como nos guste y nos atraiga.Olores, colores y sabores pueden ser experiencias que nos den dos o tres horas al día la posibilidad de concentrarnos en otra cosa y dedicarnos al disfrute.Una excelente manera de bajar la ansiedad y el estrés de la jornada.

¿Sin ideas? ¡Apps para cocinar!

Sí, Internet es una gran aliada.Si faltan ideas te recomendamos que pruebes todas las recetas que tenemos en nuestro sitio para vos (ver sección Recetas).Y para resolver cenas semanales, por ejemplo, o un almuerzo rápido, podés consultar distintas aplicaciones de cocina desde distintos dispositivos.Quécocinohoy? Es un buscador gratuito que tiene más de tres mil recetas que podés consultar por título, ingredientes o grupo de alimentos.Para divertirte y variar un poco el menú, podés consultar iCocinar, una colección de aplicaciones para Android o iOs que nos enseña todos los trucos y secretos de las comidas internacionales.Veganissimo es una aplicación gratuita para Android, para personas que no comen carne (podés elegir tipo de dieta ovolacto, lacto ovo o vegano).Y si buscás, hay muchas otras (aunque algunas son pagas) y también, muchos videos en YouTube.Así que ya no hay excusa.¡A cocinar que hace bien!