En el Día Mundial de la Diabetes, te contamos qué alimentos se deben incluir, cuáles no y la importancia de los hábitos.

 

La diabetes es una enfermedad crónica que, incluso, es considerada casi como una epidemia: según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 425 millones de personas la padecen.  

 

A su vez, la OMS alertó que si no se modifican ciertas conductas alimenticias, se estima que la diabetes afectará a 522 millones de habitantes en 2030 y a 633 millones en 2045. Entonces, es clave que quienes ya fueron diagnosticados conozcan cuáles son los hábitos y la dieta adecuada para llevar adelante su vida normalmente.

 

La importancia de los hábitos:

Son un pilar fundamental para tratar esta enfermedad ya que se puede controlar, por ejemplo, a través de las comidas que ingerimos. Comer sano para controlar el azúcar en sangre requiere cierto esfuerzo, pero la recompensa es que vas a tener la oportunidad de vivir una vida más saludable con diabetes.

 

Respetar todas las comidas:

Es otro de los puntos clave. En general, hacer entre cuatro y seis comidas por día puede ayudar a distribuir mejor los hidratos de carbono y a evitar, así, los eventuales picos de azúcar.

 

¿Qué alimentos debés consumir si tenés diabetes?

Según remarcan desde el Ministerio de Salud, es muy importante incluir una variedad de alimentos saludables de todos los grupos de alimentos:

• Frutas y vegetales.
• Granos integrales como trigo integral, arroz integral, cebada, quinoa y avena.
• Proteínas, como carnes magras, pollo, pescado, huevos, nueces, porotos y lentejas.
• Productos lácteos descremados o bajos en grasa como leche, yogur y queso.

 

¿Qué alimentos debés limitar para controlar el nivel de azúcar en sangre?

Para mantener los niveles de azúcar en sangre bajo control, es posible que tengas que reducir el consumo de alimentos y bebidas con alto contenido de carbohidratos. Esto no significa que nunca pueda disfrutarlos, pero sí ser consciente de que vas a necesitar consumirlos con menos frecuencia o en cantidades más pequeñas. En resumen, estos son los alimentos que deberías limitar:

• Alimentos azucarados como dulces, galletitas, tortas, helados, cereales endulzados y frutas enlatadas con azúcar agregada.
• Bebidas con azúcares añadidos, como jugos, gaseosas con azúcar y bebidas deportivas o energéticas regulares.
• Arroz blanco, tortillas, panes y pastas, especialmente los elaborados con harina blanca.
• Verduras con almidón, como papas, choclo y guisantes.
• También es posible que tengas que limitar la cantidad de alcohol, así como la cantidad de grasa y sal que consumís.