Las vacaciones suelen ser un momento de disfrute, sobre todo, a la hora de sentarnos a la mesa.Nos damos todos los gustos, pero después llega el arrepentimiento cuando volvemos a nuestra rutina diaria.¿Qué podemos hacer si nos sentimos así?

Guardamos un par de zapatillas en el bolso.El de correr.También un conjunto de ropa para running.Tenemos una gran determinación: en las vacaciones, se corre.Luego, la realidad es otra.Las zapatillas no salen del bolso y en plan de relax y disfrute tendemos a comer mucho más de la cuenta y además, lo hacemos mal: fritos, alcohol, harinas, azúcares… Cuando volvemos de las vacaciones la realidad se nos presenta inevitable: nos sentimos pesados y nuestro cuerpo, literalmente intoxicado.Cuando no estamos acostumbrados a ingerir ciertos alimentos, nuestra fisiología sufre.La digestión de la comida es insuficiente, la flora se desequilibra, nos sentimos hinchados… Muchas sustancias tóxicas ingresan a nuestro torrente sanguíneo y hasta nuestro hígado puede enfermarse.Y por supuesto, a todo esto, se suma que este tipo de alimentos suman muchas (¡muchas!) calorías totalmente innecesarias.

Lo ideal, frente a este panorama, es depurar el organismo.¿Cómo? Disminuyendo o eliminando, en primera instancia, esos tóxicos que veníamos consumiendo; luego, debemos ayudar a nuestro cuerpo a eliminar las toxinas ya ingeridas.Una buena desintoxicación puede durar entre 3 y 10 días, depende del estado general, de la edad, de la constitución y de si existe o no alguna patología (recomendamos siempre ver previamente al médico personal).

En primer lugar, lo ideal es consumir la menor cantidad posible de sodio (sal) y comer una fruta por la mañana.Otra clave para sentirnos más livianos y mejor es abandonar las harinas por unos días (sí, ¡se puede!).También, eliminar de la dieta postres y azúcares… Y obviamente, comidas “chatarra”.Una gran recomendación que ayuda y mucho: ¡dormir muy bien!

Lucía Guidici, Lic.en Nutrición – UBA (MN 4527 / MP 1897), nos ofrece unos tips bien concretos para compensar esas calorías extras que volvieron de las vacaciones y también, desintoxicar el cuerpo:

– Realizá siempre las cuatro comidas.

– Si salteás una comida, no la sumes a la siguiente.

– Tomá sin límite: agua, soda, infusiones sin azúcar, gelatina light.

– Tomá una sopa light ANTES de cada comida.

– Para los postres: fruta a elección.

– Reemplazá el azúcar por edulcorante.¿Dónde usarlo? Para endulzar infusiones, compotas y ensalada de frutas.

– Pan o galletitas: sólo en desayuno o merienda y controlando la porción.

– Colaciones sin harinas: fruta o gelatina light o yogurt descremado.

– Evitá fiambres, manteca, mayonesa y frituras.

– Compensá con actividad física aeróbica como caminar, correr, bailar, nadar.

– Evitá el sedentarismo diario: bajate una parada antes del colectivo, usá las escaleras del trabajo, del subte o de tu casa, evitá el ascensor!

Lo ideal es poder mantener y disfrutar de buenos hábitos durante todo el año, pero si las vacaciones fueron de puros excesos, nada mejor que unos días de desintoxicación para recuperar fuerzas y sentirnos bien nuevamente.