El Meal prep es el método más utilizado para organizarte, planificar, economizar y comer sano. ¿Por qué? Podés resolver todo en un día, armás tu menú, aprovechás los vegetales y alimentos de tus compras de temporada o en promoción y podés conservar alimentos para no tener que improvisar luego comidas rápidas y poco saludables que te saquen del apuro.

Lo primero y más importante es pensar qué comés o te gustaría comer para planificar tu compra. Armar el menú es importante para esa lista. Cuando comprás los alimentos, frutas y verduras, hacelo teniendo en cuenta la estacionalidad, son más sabrosos y más económicos.

Podés dedicar un día a la semana o al mes para las preparaciones. Con los Meal prep cocinás y dejás listas tus preparaciones para comer por porciones (ejemplo: tartas, canelones) o podés congelar los ingredientes para cocinar luego, más rápido. Por ejemplo, tener bolsas con cebolla picada, con morrón picado, puerro, cebolla de verdeo, ajo (para salteados). Guardar vegetales fraccionados ahorra muchísimo tiempo al momento de preparar una comida.

Respecto a la conservación de los alimentos, la nutricionista Paola Aira (MN 7807) aclara: “En la definición de Meal prep no hay nada que puedas hacer que implique una pérdida significativa de nutriente en los alimentos”. Aunque sí destaca algo importante: lo que se congela, sólo se puede recongelar si se lo somete a cocción. “Si congelaste una ricota y la bajás, la podés recongelar solo si la usaste para hacer un relleno cocido, si no, no”, advierte.

El freezer es el rey del Meal prep porque es lo que mejor conserva (la heladera tiene un límite de tiempo de conservación muchísimo más corto). “Lo que hay que saber es que los alimentos cocidos generalmente, se conservan bastante bien, aunque algunas frutas y verduras crudas pierden la turgencia del alimento, la firmeza. Por ejemplo, limpiás y congelás frutillas. Luego de bajarlas podés hacer un licuado o usarlas para un budín, pero para comer o para decorar, no quedan con la firmeza del fresco”, explica. Aunque aclara que muchos vegetales soportan muy bien ser congelados después de un blanqueo como el brócoli y las chauchas.

Otro gran tip es el almacenamiento en el freezer de legumbres cocidas. Tener listos para usar, por ejemplo, garbanzos, lentejas y porotos para hacer hummus, dips, ensaladas.

Para tener un Meal prep completo, Paola detalla que debería incluir frutas y verduras de estación, alguna proteína (como legumbres o carnes), alguna fuente de hidratos (cereales, puede ser arroz hervido y porcionado), y algo de grasas (las paltas resisten muy bien en el freezer, pueden ser enteras o procesadas, antes de que se oxiden).

En cuanto al aprovechamiento de los recursos, el Meal prep sirve para guardar frutas o verduras de estación, al ser más accesibles, se compran en mayor cantidad y se aprovecha más: “Se usa una parte y la otra se guarda (ejemplo: frutillas y arándanos) se pueden aprovechar promociones, se sanitizan, se guardan y las usás más adelante”, explica la nutricionista.

Una gran gurú de Meal prep es nuestra cocinera amiga Paulina Cocina, les recomendamos ver sus videos. ¡A probar!