Autora de siete libros y cientos de recetas propias, @andrearecetas llegó al millón de seguidores con un único secreto: mostrarse auténtica y compartir la pasión por la cocina. Sus recetas favoritas para la mesa navideña y la importancia de celebrar alrededor de la comida.

 

Ya llegaste al millón de seguidores. ¿Qué se siente acompañar a tantas personas en sus cocinas?

Es muy gratificante. Si bien es un número, la verdad es que es muy lindo sentir que la gente te apoya o que después de hacer una receta te escriben y te dicen que les salió perfecta. Por ejemplo, mensajes de seguidores que me dicen que no pueden creer que es la primera vez que hacen un budín y no se les hunde.

¿Por qué creés que te siguen? ¿Qué te dicen?

Creo que les gusta que las recetas sean reales y que las puede hacer cualquier persona. Es parte del secreto de haber llegado a ese millón de seguidores. Me dicen que son sencillas de realizar, que no tienen vueltas, que no me guardo ningún secreto. Y también muestro mucho de mi estado de ánimo, sobre todo en las stories: si un día estoy agotada o estresada por los chicos, lo cuento; no se ve una vida perfecta. Soy una persona real y con cosas que les pasa a todo el mundo. Tampoco uso filtros y eso ayuda a que la gente vea algo más real. Eso falta en las redes, donde todo parece perfecto.

Llega navidad, una de las fechas más importantes para muchas familias. ¿Cuáles son para vos las recetas que no pueden faltar en la mesa navideña?

Soy fanática de hacer panes, así que aposté a incentivar a la gente para que haga panettones. Tengo tres libres de panes y ahora saqué un libro de navidad, pero específicamente de panes navideños. Tiene desde stollen hasta el panettone clásico o el pan de muertos mexicano. Estoy alentando a eso. Hice una versión de un panettone muy fácil y económico, que no falla. Están todos haciendo ese panettone y me han llegado más de 300 fotos de personas que lo hicieron. Incluso, muchos empezaron a venderlo. Eso me encanta. En Argentina los panettones son carísimos y muchas personas no tenían acceso a comprarlo. Con mi receta, al hacerlos en casa, son mucho más económicos. Sin dudas, es una receta que no puede faltar.

¿Tu plato navideño favorito? ¿El que nunca falla?

Lo que siempre aconsejo es hacer una carne braseada, que lleva muchas horas de cocción y el resultado queda buenísimo. Se puede hacer con un corte muy económico, en cacerola o en el horno tapado con papel aluminio. Le gusta a todo el mundo y se puede comer al plato con alguna guarnición como un puré de batatas, o también en sándwich. ¡Lleva 5 horas de cocción!

A la hora de cocinar para estas fechas, ¿sos más clásica y apostás al tradicional vitel toné, por ejemplo, o te animás a platos más originales?

Me encanta innovar. Todas las recetas que hago son de mi autoría, ninguna es copiada o está en otro lado, pero eso es porque me gusta muchísimo cocinar. En el momento en que empiezo… ¡No sé qué va a salir! No sé exactamente qué voy a cocinar hasta que termino el plato. Me encanta improvisar, pero me parece que para ese tipo de festejos familiares soy más clásica.

¿Y qué receta clásica recomendarías para sorprender?

Voy por una colita de cuadril rellena. O también tengo una receta que es muy conocida, que son las ribs a la barbacoa y que son muy fáciles. Me gusta más innovar con las entradas, ahí es donde trato de hacer algo distinto. Eso sí, siempre trato de hacer recetas que sean aptas para todo público y para todo bolsillo, que la gente pueda disfrutar la comida y vea que no tiene que gastar una fortuna para tener un plato rico. Es importante entender, en estas fechas o en cualquiera, que cualquier bolsillo puede comer bien.

¿Sentís que la gente se anima más a cocinar para estas fechas, aún sin saber mucho sobre el tema?

Cocinar es un gesto de amor. Por ejemplo, mis hijos se ponen contentos cuando hago una comida o cuando la prueban por primera vez. Además, en mi familia paterna y materna pasa todo por la comida, porque somos descendientes de familia libanesa… Nos juntamos y siempre hablamos de recetas y preguntamos si hicieron o probaron tal plato. Básicamente, todo el tiempo estamos hablando de comida, o con la comida como excusa (ríe). Creo que muchas de las personas que me siguen se identifican con esa situación familiar. Además, cuando intentan una receta y ven que les sale, obviamente se ponen contentos y eso los incentiva a seguir cocinando. Las fiestas son una buena excusa para seguir haciéndolo.