Andrea Schettino: Me apasiona estar en el lugar donde pasan las cosas
Entrevistas

Andrea Schettino: Me apasiona estar en el lugar donde pasan las cosas

 Desde muy chiquita amaba ir a eventos deportivos y en la adolescencia descubrió que el camino era a través del Periodismo.Hace 12 años que trabaja en ESPN y disfruta con pasión su trabajo como notera.Va a cumplir 34 años y reconoce estar “orgullosa de haber vivido todo este tiempo”.Y lo dice con conocimiento de causa, ya que superó un cáncer de mama en gran parte por su “fuerza de voluntad y mucho optimismo”.Una belleza entre tanto hombre, @andreaschettino es una periodista de raza y lo demuestra donde más sabe: en la cancha.

– ¿Cuándo descubriste tu vocación por el periodismo y especialmente por el deporte?

– Mi amor por el deporte surge cuando era muy chica porque a mi familia le gusta mucho verlo.El mejor plan que me podían ofrecer de chica era ver un espectáculo deportivo.A los 12 empecé a pensar que de grande quería ser periodista y especialmente, me fascinaban los periodistas que trabajaban cerca de los deportistas y que tenían la posibilidad de estar en el espectáculo deportivo.Empecé como un juego de chicos.Cuando tenía 15 años me gané un sorteo en un programa de Vélez: viajar en limusina desde la cancha de Vélez a la de Deportivo Español.En ese viaje conozco a uno de los periodistas que yo escuchaba por la radio, al que le pregunté dónde podía estudiar periodismo deportivo.Me cuenta que justo había comenzado un taller de periodismo en Vélez para chicos.Lo convencí a mi papá, que no estaba muy seguro de que yo me metiera en algo que era “de hombres”.Hice el taller y empecé a escribir en el Boletín del club y también empecé a trabajar en la radio en la que había ganado el sorteo.En el colegio estaban todos locos porque yo era la única del curso que trabajaba.Estaba en plena secundaria y volvía del cole, hacia la tarea y volaba para la radio o para el club para levantar información.Mis compañeras no lo podían creer, porque trabajaba en fútbol, era algo de varones para ellas… ¡Y a mí me encantaba! Pude cumplir con lo que soñaba.Cuando terminé el colegio estudié Periodismo Deportivo y empecé una pasantía en TN y cuando terminó, entré en ESPN, donde voy a cumplir 12 años trabajando feliz, haciendo lo que amo.

– ¿Qué es lo que más disfrutás de tu profesión?

– Lo que más disfruto es estar en exteriores.Obviamente, me encantaría ser conductora.Pero amo ser notera porque estoy en el lugar donde pasan las cosas.A veces me encuentro en un evento deportivo y caigo en la cuenta de que estoy en un momento que va a quedar en la historia y eso lo disfruto muchísimo.Tuve la chance de cubrir el Mundial de Vóley en Italia, el Word League de Las Leonas en Londres, Wimbledon, viajes de Copa Libertadores y Copa Sudamericana a otros países; también, pretemporadas de equipos importantes.Hasta ahora, para mí, lo más importante que cubrí fueron los Juegos Panamericanos 2015 en Toronto, un evento deportivo maravilloso.Sería un sueño poder viajar a los próximos Juegos Olímpicos.

– Tu trabajo tiene exigencia física, ¿cómo te cuidás para sentirte bien?

– Trato de hacer gimnasia aunque me resulta muy difícil porque no tengo horarios fijos con mi trabajo, hay que encontrarle la vuelta porque a veces termino agotada después de 10, 12 horas de jornada.Me cuido bastante con las comidas y trato de comer sano.Otra complicación, porque estoy mucho en la calle.Cuando estoy en casa me cuido mucho, sin harinas, cero azúcar, mucha agua.

– Sos chef y bartender, ¿cuándo nació esa vocación?

– Sí, quise estudiar gastronomía para hacer algo completamente distinto a esto, salir un poco de la pelota y las canchas.Tenía ganas de hacer algo para mí, algo de “chica”, salir un poco de tanto masculino y me encanta.Después de una jornada de 10 horas en la calle, llegar a casa, poner música y cocinar me relaja un montón.Y si tengo que cocinar para muchos y usar la olla o el disco más grande, mejor.Es cuando más disfruto.

– Superaste un cáncer de mama y lo contaste en las redes para compartir tu superación y contagiar de fe.¿Cuál es un buen consejo para las mujeres que están en el camino de la recuperación?

– Sí, así fue.Y aunque suene raro, agradezco lo que me pasó porque fue una enseñanza de la vida, porque me cambió completamente lo que pienso.Siempre fui muy agradecida, pero aprendí a decirles a los míos cuánto los quiero y adoro, que uno a veces se olvida de hacerlo.Aprendí a disfrutar momentos, el trabajo, los amigos, esos instantes.Cuando uno viene muy acelerado no presta atención.Siento que después de haber superado el cáncer valoro todo más.Veo todo desde otro lugar.Y la muerte también la veo desde otro lugar.No me asusta como sí lo hacía antes.No me asusta la palabra cáncer, no me asusta la palabra quimioterapia.Pude superar todo eso y también, me demostré a mi misma que pude sobrellevarlo.En cuanto a los cuidados, lo más importante es la fuerza de voluntad y la positividad.Mi oncólogo siempre me dice que mi rápida recuperación tuvo que ver con la fuerza y la alegría que tenía cada vez que lo iba a ver y cada vez que iba a hacerme la quimioterapia.Lo convertía en una fiesta, quería contagiar de alegría a todos los que estaban ahí.Ponía música, nos reíamos, era fundamental sentirse bien en un momento que es horrible.Me sigo cuidando y estoy contenta con todo lo que viví.Me gusta mostrarlo, no desde el lugar de víctima, si no desde el aprendizaje.Me operaron, me hicieron 39 sesiones de rayos y 6 de quimioterapia y acá estoy.Entonces trato de contar eso para mostrarles a las chicas que hay que salir del pánico, hay que salir adelante.Una conoce su cuerpo como nadie.Yo misma me lo encontré y el médico que visitaba en ese momento no me hacía caso, me subestimaba, decía que era un nódulo que se iba a disolver.Yo sabía que eso no era un nódulo.Y seguí investigando, seguí adelante.No hay que tener miedo.Cuanto antes se encuentre, se cura.